Educación Financiera
Después de disfrutar unas merecidas vacaciones, debes adaptarte de nuevo a la rutina y retomar labores. Esta realidad puede costarte aún más, si en vacaciones gastaste más de lo que debías, ya que acomodar el bolsillo nuevamente no es tan sencillo.
Lo ideal es que planees tus vacaciones y tengas un presupuesto determinado, y no te dejes llevar por las frases: “para eso trabajo”, “la vida es solo una”, “es mi momento de descanso”, las cuales, si bien son ciertas, lo único que traen son gastos adicionales pensados desde la emoción y no desde la razón.
Ten presente que de esta situación debes reacomodarte lo más rápido que puedas, de lo contrario, puedes quedar endeudado muchos meses por unas cortas vacaciones, lo cual te generará -a mediano plazo- un problema financiero. A continuación, te daremos unos consejos para que logres acomodarte de una manera más fácil:
1. Haz un análisis o balance de la situación, es decir, escribe cuánto te gastaste día a día en las vacaciones y lo más importante, cuánto gastaste de más. Esto te ayudará a saber con qué dinero no puedes contar de ahora en adelante y cuánto necesitarás para solventar la deuda.
2. Realiza un plan de ahorro. En este debes calcular semanal y mensualmente cuánto puedes gastar y cuánto puedes ahorrar mes a mes para estabilizarte. Este plan te ayudará a conocer qué gastos puedes dejar para después
3. Trata de no utilizar durante ese periodo las tarjetas de crédito. Asegúrate que tus deudas no aumenten. Evita las tentaciones o los famosos ‘gastos hormiga’, como ir a tus tiendas o centros comerciales favoritos, debes enfocarte en que por ese momento tu prioridad es equilibrarte financieramente.
4. Continúa pagando tus obligaciones. Si te enfocas en únicamente salir de deudas y no en pagar tus obligaciones mensuales, puedes entrar en una especie de bola de nieve, donde se te acumularán todas las deudas. Un consejo: si dentro de tus pagos existen algunas obligaciones que puedes pagar al mínimo, hazlo, y cuando logres equilibrarte empiezas a pagar hasta un poco más.
¡Recuerda que, si tienes un fondo de emergencia, este puede ayudarte para salir más rápido de esta situación y equilibrarte después de vacaciones!
Adaptado de: La República